Cumplimos el año del Club de Lectura, y para celebrarlo
hicimos un concurso de cuentos. Elegimos, para comentar, los tres más votados: Planes, de Belén Lorenzo; El domador de yeguas, de Maribel García
y, finalmente, Cuentos por encargo,
de Jorge Plaja. En esta ocasión, especial, dejaremos que los cuentos se
comenten por sí mismos.
Cuentos por encargo
Estimado escritor: Le escribo para pedirle un cuento para mi
hijo, que la semana que viene cumple cinco años. La foto que adjunto es del
aniversario anterior. Está montado en el triciclo que le regalamos su padre y
yo, con el gorrito de fiesta y esa sonrisa suya tan amplia, fresca e intensa,
que sólo el reciente fallecimiento de su padre ha logrado empañar. Espero que
su relato le ayude a recuperarla. Por favor, háblele de su padre, de porqué la
muerte es tan cruel que te roba lo que más quieres cuando menos lo esperas.
Hágalo por mí, que yo no me siento capaz... Querido cuentista: En primer lugar,
agradecerle el cuento para mi madre. ¡Le ha encantado! Ahora le pido otro para
mi padre, porque se nos ha puesto celoso. ¡Él es así! Siempre ha sido así, no
piensa más que en sí mismo. Le adjunto alguna información, para que pueda usted
tomarle las medidas justas… Apreciado colega: Por favor, hágame otro de
asesinatos, que sigo sin inspiración y se me acaba el plazo para la siguiente
entrega… Señor escritor: Me hará un cuento, por favor, para mi novia, para
decirle que la quiero. A
ella le gusta la ropa y las joyas. Es que es muy guapa y le sientan muy bien.
No sé aún cómo ha podido fijarse en mí, que soy feo y trabajo en un taller
mecánico y no gano mucho. Aunque ahorro. Y tengo pensado un negocio que si me
sale bien va a hacerme rico. Entonces podré pedirle que se case conmigo. Aunque,
si saliera mal… Pero no importa: si no puedo pasar mi vida con ella, no me
importa pasarla en la cárcel, o no seguir viviendo. Usted me entenderá. Usted
que sabe de estas cosas, de cómo funciona el corazón, seguro que sabrá decirle
que la quiero. Que
lo mío sólo es la chapa y la
pintura. Que si un día tiene problemas con el coche me lo
trae y se lo dejamos como nuevo en el taller… Querido: Para la página web del
restaurante, este mes me prepara uno de pescado. A mis clientes les encantó el
cuento de frutas; tanto que ahora me llaman Carlos Frutos, como el del cuento.
Aún se ríen del sofrito de ciruelas, las cerezas salpimentadas y los higos al
ajoarriero. En cuanto a lo otro, para la cena de los amigos, póngale ahora un
poco de sexo homo, no me sea tan primitivo... Doctor: Permítame que le llamé
así, como muestra del respeto y la admiración que le tengo, por los cambios de
estilo que le ha practicado a mi tesis sobre la corrección del tabique nasal
con cirugía menor. Su lectura ante el tribunal fue todo un éxito… Señor: Me
dirijo a usted sólo para decirle que tiene usted muy poca vergüenza. ¿Cómo se
le ocurre pedirme dinero por un cuento? Y a mí, ¿quién me paga por leerlo? Si
necesita ganarse la vida, búsquese un trabajo de verdad... Le escribo para agradecerle
la traducción del artículo. Debía de estar soñando cuando le oí decir que ni
era traductor ni sabía chino pero era capaz de inventar cualquier cosa, lo que
fuera. ¡Curioso oficio, el suyo!… Cariño: No me cuentes milongas. ¡Es increíble
las cosas que eres capaz de inventar! Yo sé que no lo haces por maldad, que tú
eres el primero en creerte tus cuentos. Ja, ja. Decididamente, eres un
mentirosillo peligrosín. Y a pesar de todo, he de reconocer que me gusta. Sin
tus cuentos, la vida no sería lo mismo. Pero, cariño, ya sabes que conmigo puedes
quitarte la máscara, esa mezcla variable de personajes con que te disfrazas.
Aunque te cueste creerlo, hay quien no te quiere sólo por tus cuentos. Te diré
más: a veces te prefiero cuando callas, porque es entonces cuando te siento
mejor. Cariño, tú no sólo eres una boca que habla, no eres sólo las manos que
escriben con el teclado. Y no estaría de más que también tú me vieras de vez en
cuando como realmente soy, más allá de como me inventas. A veces tengo miedo de
no ser para ti más que un personaje más, que cualquier día termine esta historia
y yo pase a engrosar la lista de las mujeres que al final siempre acabas
dejando, porque no eres capaz de vernos más allá de como nos inventas…
Papá: No olvides venir a comer el
domingo, que los niños preguntan por ti. Ya les está faltando verte. No quieren
decírmelo, pero yo creo que ya están empezando a creer que no eres más que una
invención, un personaje más de los Cuentos
del abuelo, ese libro de páginas en blanco que cada noche leemos para
dormir. De alguna manera, has venido a llenar el vacío que dejó su padre. Ya
apenas preguntan por él. En cambio, cada día te inventan, cada día inventamos…
cada día os invento... ¡Ya no sé lo que me digo! Bueno, me voy a dormir porque
estoy agotada, ¡atacada de los nervios! Me está costando mucho llevar el
restaurante yo sola. Pero, al menos, me ayuda a no pensar en otras cosas. No sé
que sería de mí si un día descubriera el local vació y en la puerta una notificación
de embargo. Mañana tengo que llevar el coche al mecánico. ¡A ver si no me lo
han metido todavía en la cárcel! Te queremos mucho… te quiero… os quiero. Un
beso de buenas noches para todos vosotros, mis queridos personajes y lectores,
de una niña sola, que os necesita, más que nunca.
Jorge Plaja Rupstein
Planes
Al principio, todos le dijeron que
sí por convicción. Luego, la sensatez se abrió camino hasta hacerlos retirar su
promesa de estar con él. De esta manera, el día señalado como el último del
mundo, él se encontraba solo. Acompañado únicamente de sí mismo, aquella
mañana se asomó tranquilamente al balcón, donde ya podía divisar los hermosos
arabescos de fuego que empezaban a dibujarse en el cielo.
Belén Lorenzo
El domador de Yeguas
Daño:
Efecto de dañar.
Dañar: 1.-Causar…dolor*
2.-Maltratar o echar a perder algo.
*Dolor: 1.-Sensación molesta y aflictiva de una
parte del cuerpo.
2.- Sentimiento y pena que se padece en el ánimo. (Del diccionario de La RAE)
FUE COMO UN ABRAZO AL REVÉS ( EL AMOR AL REVÉS!..*) La envestía descargando sobre ella su reprimida furia de
macho (aquel infantil odio hacia una madre que no supo AMARLO*) Le
aliviaba “doblegar” a mujeres sin rostro (le gustaban sus lomos y sus
ancas). Le atraían sus melenas como
crines de las que tirar para domar a aquellas yeguas “desbridadas”.
Su estrategia era soterrada y fina;…su señuelo: su estudiada
indiferencia;…su mejor técnica: su paciencia demoledora. Le daba igual que se le escapara alguna,…ya
vendría otra que podría resultar mejor ejemplar “ecuestre”. –Antes o después
vendrás a mi cuadra-intuía con entrenado
olfato en augurios tantas veces confirmados.
Las atraía su rara displicencia; se entregaban unas (ejemplares de más
casta) en briosos pulsos…las otras se rendían embelesadas por el sutil poderío,
o la frágil ternura de su absurda personalidad.
Todas acabarían padeciendo* (o
disfrutando, él lo creía así) su látigo.
-Yo sé muy bien de lo que tú tienes ganas, potra,…vas a aprender lo que
es una buena hembra!-murmuraba enfebrecido, -Me estás haciendo daño*- musitó ella al “príncipe Rompesueños”, aturdida
aún por la confusión de su estúpida inocencia y su repentino estupor*;...luego, desmadejado ya, en un desliz, casi
decía (era un eco abisal, desvaído, un consuelo o una lástima): -Cada palo que
aguante su vela-*.
De tarde en tarde, repasaba su “palmarés” con celo de coleccionista;
entonces un daño enmohecido fluía de sus entrañas y le empañaba una pueril
melancolía,…un dolor vidrioso, innombrable…*
<<ME HICISTE DAÑO>>
“Ella se ha cansado de tirar la toalla,
se va quitando poco a poco telarañas,…..no ha dormido esta noche pero no está
cansada,…hoy sueña lo que quiere sin preocuparse por nada….”
….cantaba Bebé
desde “La Cadena Dial” en el radio-cassette “apalancado” en la cocina. Gloria tenía en casa un ordenador decadente
instalado en el dormitorio que usaba para bajar música de You-Tube,…y tres
aparatos de música: el radio-cassette de la cocina, una mini cadena con la que
ambientaba su relajante baño nocturno a la luz de una vela (un ritual cotidiano
con el que mimaba su recién estrenada autoestima) y el flamante estéreo de la
sala, un magnífico aparato de última generación, un golpe de suerte en el
sorteo de la pasada Feria del Voluntariado; ella participaba con el colectivo
“EX”, una amalgama de mujeres con distintos ascendentes pero afines en el ex
(afines en el daño!*):…ex esposas, ex
alcohólicas, ex maltratadas, ex prostitutas, ex “drogatas”, ex jóvenes, ex
bellas, ex..traviadas!..; últimamente, con la crisis, un aluvión de mujeres en
paro, ex trabajadoras, había engordado las filas de la asociación. Con el apoyo de las chicas de Asuntos
Sociales bajo la batuta de la concejala socialista, se estaban haciendo
cosillas,…se estaban haciendo oír, y, sobre todo, se estaban haciendo compañía.
-La vida sin
música es como una película sin banda sonora- sentenciaba Gloria a sus
amistades, no sin cierta solemnidad, encantada de haber descubierto aquella
gran frase con la que justificaba su dispendio musical.
“Hoy vas a
descubrir que el mundo es sólo para ti,…que nadie puede hacerte daño ,…hoy vas
a conquistar el cielo sin mirar lo alto que queda del suelo…”
A Gloria le
gustaba especialmente la canción de Bebé pero decidió cambiar de
frecuencia….recordó que a esa hora se emitía una popular tertulia y había visto
en Facebook que el tema del día sería “VIOLENCIA DE GÉNERO, LENGUAJE SEXISTA Y
ACOSO SEXUAL EN EL TRABAJO”….; sintonizó la emisora y volvió a su quehacer
culinario. Terminaba de hablar la
psicóloga Esperanza Vega, con su inconfundible voz ronca, del colectivo Malva:
-…acostumbramos a asociar los malos tratos con la pareja, pero no olvidemos que
el maltrato se ejerce en otros tipos de relación, puede haber otros vínculos,
trabajo, parentesco, sin olvidarnos que no siempre hay daño físico, y el
perjuicio para la víctima, no por menos aparatoso deja de ser lesivo
emocionalmente...*-. Tomaba la palabra Yaiza Conde, joven
abogada, librepensadora, independiente políticamente, progresista y solidaria
con causas no siempre perdidas,….se quejaba de la falta de implicación por
parte de los hombres en los temas que afectaban directamente a la mujer……la
locutora la interrumpía para dar paso a un oyente que deseaba expresar su
opinión al respecto: -Estoy
completamente de acuerdo con Yaiza. En
la sociedad no habrá igualdad mientras hombres y mujeres no se instalen en un
nuevo modelo mental, una especie de androginato psíquico, en el que cada cual
reconoce y ejerce la polaridad masculina y femenina en una interacción
integrada- una cadencia melosa se
derramaba sutilmente en aquella voz netamente viril,-…es un evolucionado nivel
de conciencia que pondría fin al nivel primario del “macho dominante” y “la
hembra sometida”-. Hubo exclamaciones
de aprobación por parte de las contertulias, alguna celebró esta intervención
como un ejemplo a seguir por la posible audiencia masculina. Yaiza Conde hizo mutis, se sacudió su sensual
melena con un gesto diríase equino,…un relincho interior la estremeció
raramente, una intuición indescifrable.
- ¡Un posicionamiento digno de un hombre del siglo XXI!- exclamó Carmen
Campos, la inteligente locutora, despidiendo tan lúcida participación.
Gloria había
estado picando cebolla para un sofrito, ..”el corte” fue inevitable..* su dedo sangraba abundantemente, corrió al baño,
se puso agua oxigenada,…tenía las tripas revueltas!....pero no era por la
sangre... Su desprecio explotó en un
bronco bufido de corcel previo al desboque.
<<ME HICISTE DAÑO>>
Colgó el auricular del teléfono; (
el insatisfecho fugazmente satisfecho!...) había logrado impresionar….se
recostó en el viejo
diván de sus largas siestas, (de sus muchas domas) y pensó en Yaiza Conde,…entonces su agraciado
rostro se contrajo compulsivamente con aquel tic de niño mal amado*, de hombre desamorado*,
coleccionista de yeguas, domador de hembras.
<<CADA PALO QUE AGUANTE SU VELA>>
Gloria volvió a la
cocina después de vomitar su rabia y…cambió de onda.
“…..hoy vas a ser
feliz aunque el invierno sea largo, hoy vas a conseguir reírte hasta de ti y
ver que lo has logrado,….hoy-vas-a-ser………LA MUJER QUE TE DÉ LA GANA DE SER!”
Maribel García
Para acabar, el
anuncio de la próxima sesión del Club de Lectura, el jueves 21 de febrero, a
las 20:15, en la Biblioteca de Teatro Antonio Abdo. Comentaremos El pozo y el péndulo, de Edgar Allan
Poe.
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