"LA BIBLIOTECA ENCANTADA, ENCANTADA DE CONOCERNOS"
Club de Lectura Infantil de la Biblioteca de Los Llanos de Aridane
PERSONAJES
Sofía: Responsable y seria. Pelo largo, delgada, siempre enfadada.
Manuel: Inteligente y blandengue. Cara redonda, pelo negro y con flequillo.
Paolla: Dura. Pelo largo, tatuaje en la pierna, cara de mala.
Thais: Charlatana. Divertida, pelo corto y ojos verdes.
Alejandro: Inteligente, chiflado por los ordenadores. Gafas de culo de botella, rubio e inteligente.
Lucas: Macarra. Musculoso, pelo marrón, cara de pocos amigos.
Rubén: El demonio. Moreno, pelo corto y pensativo.
Maroa: Pija. Bien vestida, maquillada, rubia, de pelo largo.
María: Artista. Siempre con coleta y súper sincera.
Andry: Funky. Piel morena, pelo negro y muy amiga de sus amigos
Michael: Deportista. Pelo media melena, deportista y una sonrisa preciosa.
Eugenia: Bibliotecaria. Con gafas, coleta e hiperactiva.
LUCES
Siempre enfocando a los niños en la mesa central, a excepción de cuando, en un momento determinado, María se pone a dibujar y Michael interviene en dos ocasiones que está arrinconado en una silla al fondo del escenario.
DECORACIÓN
Estantería con libros, sillas, mesa, una máquina de golosinas, colores, papel, varios móviles.
ACTO ÚNICO
En el centro del escenario: una mesa, una silla, estantería, libros, una máquina de golosinas y un grupo de niños estudiando. En la parte de atrás del escenario: una puerta y un niño lavándose las manos. Se cierra el telón. Se escucha un ruido de llaves. Acto seguido, se abre el tolón y todos se miran entre ellos.
Carla sale corriendo a ver qué ha sido ese ruido.
Sofía: ¿Qué ha pasado? (Se queda pensativa. Escucha un ruido pensando que es Carla.)Manuel: (Dice con voz temblorosa.) Carla, ¿eres tú?
(Un silencio se apodera de la sala.)
Paolla: ¿Quién está ahí?
(En ese momento aparece un niño por la puerta del baño.)
Thais: (Le dice al grupo, bajito.) ¿Ese de ahí quién es?
Alejandro: (Se acerca un poco asustado al niño.) ¿Quién eres? ¿Y qué haces aquí?
El niño: (Responde con aire desafiante.) Mi nombre es Lucas, pero me llaman El Cobra (Y hace una señal con la mano.) Y he venido al baño.
Rubén: ¿Qué ha dicho? ¿El Cabra o El Cobra?
Paolla: Yo creo que El Cabra.
Lucas: El COBRA.
Manuel: Creo que me he hecho pi pi.
Maroa: Hola Cabra.
Alejandro: (A Maroa.) Cobra, que se va a enfadar. Y como mucho el nombre científico: TONTUS COBRUS.
Lucas: ¿Y qué hacen ustedes aquí, chavales?
María: Un trabajo para clase de historia.
(De repente aparece Carla gritando.) Nos han encerrado.
Sofía: Dejémonos de presentaciones y salgamos de aquí.
(Los chicos, desesperados, intentan hablar por el móvil.)
Maroa: Mamá, ¿estás ahí? Me he quedado sin pintalabios. ¿Y entonces? Paolla. (Grita.) ¡Vete al grano! Se escucha un pitito, pi, pi, pi.
Lucas: ¡Niñatos!
Rubén: Oye, tío, no te pases.
Lucas: (Contestándole a Rubén.) ¿Y tú qué decías?
Rubén: Déjanos en paz.
Sofía: (Enfadada, le grita.) ¡Eh, tú! ¿Qué vas a hacer?
Lucas: (Sentándose y cogiendo un libro, grita.) Reírme un rato de ustedes. Hala, pero este libro es de un ratón y está vivo. Lo mataré. (Empieza a golpear el libro, intentando matarlo.)
Manuel: ¿Pero qué haces con el libro, que te lo vas a cargar? ¿No ves que no es un ratón de verdad? ¡Es sólo fantasía!
Lucas: Vale, es verdad. Es mejor no romperlo. Es un ratón periodista y me puede entretener.
Paolla: (Intenta llamar a su madre.) ¡Mamá, estoy...! (La otra persona reponde: "Paolla, estoy en la cárcel".) ¿Otra vez, mamá? ¿Cuántas veces te he dicho que no le pegues a los guardias, mamá? (Paolla se queda pensativa y tira el móvil al suelo enfadada.)
Sofía: ¿Qué os pasa? ¿Es que no queréis salir de aquí?
Andry: (Que está intentando coger una chocolatina de la máquina. Grita.) A mí lo que me pasa es que no me sale la chocolatina de la máquina. (Y le pega una patada.)
Lucas: (Sigue leyendo el libro que tiene en la mano, lo mira y se ríe.) Luego dicen que el macarra soy yo.
Rubén: ¡Así no! ¡Un poco más fuerte! ¡Así! (Y le pega una patada y se abre la máquina completamente.)
Thais: Tenemos comida. Podemos sobrevivir.
Sofía: Tanta chocolatina no es buena para la salud.
Maroa: Ni para el cutis.
Lucas: Ni para el coco.
Manuel: Ni para nada. Salgamos de aquí.
Thais: (Llama a sus padres. "El número 60554532 está apagado o fuera de cobertura".)
(Michael lleva toda la noche entretenido con un libro de historia del deporte y no se ha enterado de nada.)
Sofía: (Le grita.) ¡Eh, tú! ¿Qué? ¿No ayudas?
Michael: Michael Jordan se llama como yo. Perdón, ¿decías algo, Sofía?
Carla: No tenemos otra cosa que hacer. Nos tendremos que quedar aquí hasta mañana.
Manuel: ¿Qué? ¿Yo? ¿Aquí? ¿Sólo en la oscuridad oscura, sin mi estuche y mi calculadora?
Maroa: No puedo dormir sin mi antifaz y sin escribir tres líneas de mi diario.
Andry: Ni yo sin que mi mami me lea mi cuento.
Lucas: ¿Cuál quieres que te lea, princesa?
Alejandro: Jooooooo, ni sin mi supertelevisión de plasma.
Sofía: ¡Qué inmaduros son! Todos necesitáis dormir con un peluche o cuento.
Carla: Ay, la señorita perfecta.
Sofía: ¿No te traes a tu muñequita?
Carla: Para tu información, la tengo en la mochila.
(Lucas sigue partiéndose de risa, intentado saber cuál es el más listo de todos.)
Manuel: Lucas, no te rías, que seguro que duermes con algo ridículo como nosotros.
(Lucas se levanta de repente.)
Lucas: ¿Qué dices?
(Y todos tiemblan.)
Lucas: Yo duermo con mi gatita Arcoiris.
Maroa: ¿Por qué ese nombre?
Lucas: Porque es de todos los colores.
Andry y Thais: ¿Y por qué? ¿No es una gata?
Lucas: Practiqué grafitos con ella.
Andry: (Choca sus manos con él y dice:) Así se hace, colega.
Manuel: Pobre gata.
Alejandro: (El informático del grupo, que estaba jugando con el ordenador.) Digo: voy a mandarle un whatashapp a mi madre; pero sorpresa, chicos, ¿a que no sabéis? Tampoco hay Internet.
Carla: Debió desconcertarlo Eugenia antes de irse.
Alejandro: ¡Pero sin embargo de nosotros sí se olvidó!
María: Señor Cabra, ¿puedo hacer un dibujito, ya que vamos a estar juntos toda la noche?
Lucas: ¡No! ¡Date el piro!
Sofía: Sólo intentaba entretenerse, déjala en paz.
Carla, María, Sofía y Thais: (Gritan temblorosas.) Sí, señor Cobra, déjenos en paz.
Alejandro: ¡No te metas con ella, niñato!
Maroa: Sí, sí, sí, señor Cabra, usted a sus asuntos. ¿Y cuáles son sus asuntos?
María: Fastidiar a los demás, pero no calientes más el ambiente, que estamos solos ante el rata.
Paolla: (Se empieza a poner nerviosa. Se enfada.) ¡Me cachis! ¿Cuántas veces van ya?
Thais: ¿Qué dices, Paolla?
Paolla: Que cuántas veces han metido a mi madre en el calabozo. Son quince o dieciséis.
Sofía: Paolla, concéntrate en lo que estamos haciendo, luego te encargas de tu madre.
Alejandro: Oiga, señor Cabra, no, perdón, Cobra, quiere usted ver mi e-book. tiene muchas aventuras de Gerónimo Stilton. (Lucas se lo saca de las manos.) Tío Cabra, devuélvemelo.
Lucas: ¡Cógelo si puedes, pringado! (Lo lanza al aire y cae en la mesa de Michael.)
Michael: ¿De dónde ha salido esto?
(María se aparta a una esquina y comienza a dibujar.)
Carla: (Se levanta seria, va derecha a Michael.) Dame eso, que no ayudas en nada.
(Carla le devuelve el e-book a Alejandro.)
Alejandro: Gracias, mercì, thank you, grazie, danke.
Carla: ¿Eh?
Lucas: Jolines. Lo que voy a aprender esta noche. Hasta idiomas. Ni en mis mejores sueños.
Andry: No lo sabes tú bien. (Y choca las manos.)
Maroa: (Hablando con Paolla, se acuerda de las rebajas al ver el periódico.) Chicos, mega oferta en vestidos.
Carla: ¡Pero qué superficiales son!
(María recorta los dibujos y los reparte a todos.)
Lucas: ¿Y esto qué es?
María: ¡Tu gatita Arcoiris! ¿No la necesitabas? Ahí la tienes.
Maroa: ¡Es de papel! ¡Puedo escribir! ¡Qué guay!
María: ¿Contentos?
Paolla: Contentísimos: sin cenar, sin televisión, sin mis padres...
Maroa: Sin mi antifaz, sin mis rulos...
María: ¡Sin mis lienzos! Los quiero. Los necesito.
Lucas: (Gritando.) ¿Os habéis escuchado? Quiero. Necesito. ¿Y yo qué? ¿Quién soy?
Thais: (A Rubén.) El macarra de turno.
Lucas: ¿Y tú de qué me conoces? Ni siquiera me han hecho caso alguno.
Alejandro: ¿Nosotros egoístas? Pero si tú eres el que está habalndo de ti TONTUS COBRUS.
Andry: ¡Quiero más chocolatinas!
Lucas: ¡Más! ¡Más! ¡Más! ¡Si te has atiborrado! ¡Y Carlita sólo piensa en ser valiente y está muerta de miedo!
Maroa: (A Thais.) ¡Mi cara tiene que estar más brillante que una farola!
Lucas: (Repite.) ¡Mi cara tiene que estar más brillante que una farola! ¿Y tus oídos? ¿Qué te pasa? ¿No escuchas, niñita?
Maroa: Yo sí escucho, pero sólo lo que me interesa.
Lucas: Ése es tu problema y el del resto de la sociedad. Manuel, Maroa, Andry, Alejandro, Rubén, Thais, Michael, el eterno bello durmiente, y Carla y Sofía las duquesitas. Y Paolla tan macarra como yo. ¿Quieren escuchar una historia y no es de Jerónimo Stilton ni de Blancanieves? No todas las historias están llenas de arco iris, príncipes y princesas. Escuchen: Lucas Gómez, nacido en El Polvorín, sin amigos de confianza, mi padre en paro y mi madre alcohólica, y ustedes se quejan de quedarse en esta biblioteca rodeados de libros.
(Un silencio se apodera de la sala.)
Alejandro: ¿Y por qué no
lo dijiste antes?
Andry: ¡Lo siento, tío, hemos
sido unos egoístas!
Thais: (Con los ojos
tristes lo mira y dice:) Lo siento Lucas. Tendríamos que haber sido más amables
contigo.
Rubén: Al fin y al cabo,
todos somos niños y tenemos sentimientos.
Andry y todos: (Dicen lo
mismo, excepto Maroa.) Nuestra infancia tampoco ha sido fácil.
Maroa: La mía sí que ha
sido fácil.
Michael: Y la mía
también.
(Comienza una charla
entre todos sobre su vida, sus gustos, sus libros, etc. Al final todos tenían
en común la lectura y que eran niños. Ruido de llaves. Eugenia entra. Mira la
mesa y los ve charlando.)
Lucas: (Hace un gesto de
silencio.) Ni una palabra de mi vida. Sigo siendo macarra, El Cobra. Que está
en juego mi reputación.
Rubén: Tranqui, colega,
ni una palabra.
Todos: (Menos Maroa.)
Perfectamente.
Maroa: ¡Cómo se te ocurre
dejarme aquí! ¡Perdiéndome las rebajas!
Lucas: Hasta luego peña.
Maroa: (Sale corriendo y
le da un trozo de papel.) Mi móvil está apuntado aquí. Llámame y tomaremos
algo.
María: (A Lucas.) ¡El
lunes aquí todos!
Lucas: Yo me abro.
Eugenia: ¿Qué ha pasado?
Thais y Manuel: (Al mismo
tiempo.) Que nos abrimos.
María: (Vuelve a entrar y
dice.) Eugenia, ¡tú no has visto nada!
Alejandro: ¡Hala! Si
tenía un móvil con conexión a Internet.
Todos: Lo matamos. (Y
salen corriendo detrás de Alejandro.)
Alejandro: ¡Chicos, no
utilicen la violencia!
Rubén y Manuel: (Gritan.)
¡A dar mamporros!
FIN
Club de Lectura de la Biblioteca Municipal
de Los Llanos de Aridane (formado por Andry Vivero Saucedo, Carla Rodríguez
Acosta, Maroa Arteaga Cáceres, María Sánchez García, Paolla Silva de Meneses,
Thais Martín Racinero, Manuel Díaz Echevarría, Alejandro de Paz Acosta, Rubén
Gómez Hernández, Sofía Lavers Tejedor y Michael González Boncompte y coordinado
por Eugenia Cabrera Reyes. Dibujos de Manuel Díaz Echevarría.)
Primer Premio en la Categoría Infantil
29 Premio de Obras de
Teatro escritas por Niños y Jóvenes
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